Cosméticos personalizados para adultos mayores
El proyecto SuperFlex persigue la fabricación de cosméticos personalizados para adultos mayores, logrando reducir costos.
Las alteraciones de la piel con el paso de los años afectan a la calidad de vida de las personas. Los productos para el cuidado regular de la piel pueden disminuir algunos sÃntomas del envejecimiento como las arrugas, manchas y sequedad de ésta pero tienen limitaciones a la hora de proteger la piel de contaminantes microbianos y de disminuir la inflamación, irritación y otras manifestaciones relacionadas con el envejecimiento. Además de las caracterÃsticas propias de la piel de personas mayores de 60, cada individuo presenta unas necesidades especÃficas y por tanto unos requerimientos paliativos diferentes. De estas premisas surge la necesidad de desarrollar cosméticos personalizados, capaces de dar respuesta a las necesidades especÃficas de cada individuo.
En este contexto nace el proyecto Superflex, impulsado por la  Comisión Europea dentro del VII Programa Marco y en el que participa GAIKER-IK4, y cuyo objetivo es acercar la cosmética personalizada a la población mayor de 60 años, reduciendo los costes, el impacto ambiental y el tiempo de comercialización que esto conlleva.
Inicialmente, se generará un método de diagnóstico especÃfico que permita evaluar con rapidez el tipo de piel del potencial cliente, incluyendo a pacientes afectados de rosácea y diabetes mellitus tipo 2. Para elaborar la metodologÃa que permita determinar los diferentes tipos de piel, se parte de un estudio que se realizará con 80 personas; los responsables de las tareas dermatológicas del proyecto establecerán los perfiles bioquÃmicos y fÃsicos de los diferentes tipos de piel.
La investigación plantea, a continuación, diseñar y construir una mini fábrica capaz de producir cosméticos personalizados de forma competitiva y sostenible, mediante un sistema de fabricación de bajo coste y bajo consumo de energÃa, teniendo en cuenta todo el ciclo de producción, incluyendo envases sostenibles con recubrimientos respetuosos con el medio ambiente, evitando, por ejemplo, los Compuestos Volátiles Orgánicos.
A partir de los datos de diagnóstico se configura de manera automática la formulación cosmética para el individuo. Los cosméticos, que se fabricarán en el seno de esta nueva instalación, contendrán diferentes principios activos (por ej. vitamina C, ácido hialurónico, sales del mar muerto, etc.) y su presencia en la composición final del producto dependerá de lo que el diagnóstico haya establecido en cada caso.
Por último, el proyecto podrá en marcha un modelo de negocio integral que, haciendo uso de las TIC (TecnologÃas de la Información y la Comunicación), permita generar un sistema de información con todos los datos relativos a cada cliente/consumidor y un sistema de etiquetado personalizado para cada producto fabricado.
Financiado por la Comisión Europea con 6.200.000€ y con un presupuesto total próximo a los 9.400.000 M€, en el proyecto SuperFlex participan un total de 13 empresas y centros de investigación procedentes de 5 paÃses diferentes. Liderado por la la multinacional cosmética israelàAhava, Dead Sea Laboratories, SuperFlex se prolongará hasta agosto de 2017.