Bioero

Los biofármacos podrían a partir del 2011 revolucionar los tratamientos oncológicos mediante una medicina personalizada, pudiendo sustituir la quimioterapia.

Debido a que los biofármacos tienen un origen biológico, ya sea una proteína o ácido nucleico, posibilitan el diseño de una terapia más personalizada.

Según el consultor Kapil Dhingra, prestigioso oncólogo, “los biofármacos permiten desarrollar un tratamiento a la medida del paciente”. En tal sentido, hay tres principales tratamientos biotecnológicos: los anticuerpos monoclonales, que se unen a moléculas específicas y bloquean los efectos causantes de enfermedades; las vacunas, que potencian el sistema inmune del paciente; y las terapias genéticas, en las que se modifica específicamente un gen.

Los biofármacos pueden funcionar como un conductor de drogas y serán una nueva generación en este tipo de medicamentos, siendo de hecho mucho más potentes. Actualmente hay un par de laboratorios que en 12 meses comenzarán a probar los anticuerpos para trasladar las drogas de la quimioterapia directamente a la célula cancerígena y “matar” las células tumorales de manera específica. Para ello se empezará a trabajar con cáncer de mama y el cáncer linfático. En el futuro la aplicación de los biofármacos a la terapéutica oncológica podrá reemplazar a la quimioterapia tradicional, siendo en entonces una quimioterapia dirigida que sea mucho menos tóxica debido a que la droga llega sólo al tumor, con lo que se minimizan su toxicidad y los efectos adversos.

Si las investigaciones arrojan resultados positivos, en unos 5 años podría prescribirse como tratamiento, en una primera etapa acompañando la quimioterapia tradicional.

Los biofármacos podrán también complementar el tratamiento oncológico con las terapias genéticas, ya que se iría a las causas del cáncer de una manera más profunda. De este modo, sabiendo el tipo de mutación génetica, que afecta a una persona permitirá buscar la quimioterapia apropiada para cada tipo de paciente.
Sin embargo, para llegar a esta etapa en la terapia oncológica aún es necesario continuar la investigación científica y destinar alto capital de inversión. Fuentes de la industria estiman que se requiere unos 1.000 millones de dólares para llegar a comercializar un biofármaco.

Por mayor información sírvase dirigirse a: http://www.asco.org/